Radio
Suelo calificarla como “la bendita locura de la radio”. No sé cuándo comenzó mi pasión por este medio pero estoy convencido que mucho antes de escuchar en ella los últimos éxitos musicales. Porque, hubo una época, en que la radio –y también la televisión- eran los únicos medios para estar al día de cantantes y bandas. Y es que hubo unas décadas –hace ya mucho tiempo- en que los formatos para escuchar música no tenían nada que ver con el mp3; incluso había que ir a unos lugares llamados “tiendas” o “comercios” especializados y COMPRAR música.
En mi caso, la radio guarda mucha relación con la literatura. Y es que uno de los programas que me enamoraron de la radio fue HISTORIAS, de Juan José Plans, en RNE. Se trataba de la dramatización radiofónica de clásicos del terror y la ciencia-ficción. También recuerdo un programa que todavía continúa en antena: LA FINESTRA INDISCRETA, del crítico cinematográfico Àlex Gurina. También recuerdo la voz del misterio: Jiménez del Oso. Y luego vinieron otros: el más grande, Juan y su ROSA DE LOS VIENTOS; Miguel Blanco con ESPACIO EN BLANCO; Iker Jiménez con MILENIO TRES; Andreu Buenafuente con EL TERRAT… Y no puedo olvidarme del mítico Ramón Trecet y su DIÁLOGOS TRES.

¿Cómo llego a Radio La Mina? Por casualidad. Estaba buscando información sobre la historia de la radio en España y esta radio se presentaba como una de las más veteranas en lo que respecta a la radio asociativa y vecinal. Tuve la fortuna que, en aquellos momentos, se hacían cursos y me apunté a uno de ellos.
Cuando lo terminé me propusieron que, sin tenía disponibilidad de tiempo, me pasase pro allí y fuese haciendo prácticas. El día que salí en antena por primera vez fue tremendo porque había autoridades municipales en la mesa. Recuerdo que, junto con otra compañera –con mucha más experiencia que yo- hicimos una agenda de actos de los municipios de Sant Adrià como de Santa Coloma.
Parece que gustó y, al cabo de unas semanas, me dijeron que la emisora iba a cubrir las elecciones municipales de 2015, y que necesitaban una voz neutra para realizarlas. Y así es como comenzó todo. Yo me daba por satisfecho con un pequeño programa semanal de músicas y me encargaban entrevistas a todas las fuerzas políticas en plena campaña electoral.
Esos fueron mis comienzos en esta bendita locura. Y no hubiesen sido posibles si tres personas no hubiesen confiado en mí y me hubiesen ayudado en todo, incluso solventando mis muchos errores: Miriam García, Nùria Arnau y Martín Arcos.
Ahora realizo tres programas que, en algunos momentos, se solapan: MUNDO LÍQUIDO, LAS MÚSICAS DEL JARDÍN SECRETO y EL SONIDO DE LAS PALABRAS.
